No esperes más, ponte en camino

El 4º Domingo de Pascual, el Domingo del Buen Pastor, la Iglesia nos invita a orar por las vocaciones. Este año celebramos el 60º aniversario de esta Jornada Mundial por las Vocaciones. Fue instituida por san Pablo VI en 1964, durante el Concilio Ecuménico Vaticano II, como explica el papa Francisco en el mensaje escrito para la ocasión.

Lo esencial de esta celebración es ayudar a los fieles a responder a la llamada y a la misión que el Señor confía a cada uno en el mundo de hoy, con sus heridas y sus esperanzas, sus desafíos y sus conquistas.

” Vocación: gracia y misión” es el lema que es propuesto para este año. Estamos llamados a “redescubrir con asombro que la llamada del Señor es gracia, es un don gratuito y, al mismo tiempo, es un compromiso a ponerse en camino, a salir, para llevar el Evangelio.”

Cuatro puntos principales del mensaje:

Elegidos antes de la creación del mundo
Yo soy una misión en esta tierra
Llamados juntos: convocados
Gracia y misión: don y tarea

Para finalizar este mensaje, el papa retoma la oración compuesta por san Pablo VI para la 1ª Jornada Mundial de las Vocaciones, el 11 de abril de 1964:

Jesús, divino Pastor de las almas, que llamaste a los Apóstoles para hacerlos pescadores de hombres, abre a Ti también las almas ardientes y generosas de los jóvenes, para hacerlos tus seguidores y tus ministros; hazlos partícipes de tu sed de redención universal […], descúbrele los horizontes del mundo entero […]; para que, respondiendo a tu llamada, prolonguen aquí en la tierra tu misión, edifiquen tu Cuerpo místico, la Iglesia, y sean sal de la tierra y luz del mundo.

La Iglesia es una sinfonía vocacional, con todas las vocaciones unidas y diversas, en armonía y a la vez “en salida” para irradiar en el mundo la vida nueva del Reino de Dios.